EDITADO EN HUELVA INFORMACION / Juan A. Hipólito
Sor Modesta, la última Hija Adoptiva nombrada por el pleno del Ayuntamiento de Nerva en agosto de 2002, coincidiendo con el día en el que los nervenses celebran su emancipación como pueblo independiente de Zalamea la Real, cumplió el pasado 4 de noviembre sus 102 años de vida en este mundo.
Recientemente, un equipo de redactores de la emisora municipal de radio y televisión de Nerva y de la revista cultural Nervae pudo comprobar in situ el excelente estado de salud en el que se encuentra una de las personas vivas más queridas por generaciones enteras de nervenses.
Sor Modesta, la última Hija Adoptiva nombrada por el pleno del Ayuntamiento de Nerva en agosto de 2002, coincidiendo con el día en el que los nervenses celebran su emancipación como pueblo independiente de Zalamea la Real, cumplió el pasado 4 de noviembre sus 102 años de vida en este mundo.
Recientemente, un equipo de redactores de la emisora municipal de radio y televisión de Nerva y de la revista cultural Nervae pudo comprobar in situ el excelente estado de salud en el que se encuentra una de las personas vivas más queridas por generaciones enteras de nervenses.
Sor Modesta con otras dos hermanas y los miembros de la emisora de Nerva que le rindieron un homenaje en la casa de las Hijas de la Caridad en Sevilla.La hermana se encuentra desde hace años en la casa provincial de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl en Sevilla donde la cuidan con esmero y dedicación. Tras entregarle varios regalos y fotos de recuerdo entablamos con ella una interesante conversación que pone de manifiesto la buena memoria que atesora esta mujer y sus sentimientos por su Nerva del alma, que recuerda con nitidez.
A pesar de su avanzada edad, sor Modesta recuerda todo como si fuera ayer, desde su llegada con apenas 20 años a la Nerva convulsa de los años 30 hasta su inevitable partida de la localidad minera, después de toda una vida de entrega a los más necesitados, por falta de nuevas vocaciones y la clausura de la casa local de las Hijas de la Caridad, pasando por la crueldad de la Guerra Civil Española y las penurias provocadas por la posguerra, la atención a las familias más necesitadas y la educación de varias generaciones durante décadas.
Su rostro sereno contrasta con la dureza de muchos de sus recuerdos.Sor Modesta, natural de San Juan del Rebollar, Zamora, no olvidará jamás la breve conversación que mantuvo con una de sus hermanas cuando, siendo una veinteañera, se enteró de su traslado a Nerva. Al ser advertida sobre la dureza del territorio y la tosquedad de las gentes de las minas, ella respondió: "No sé dónde está Nerva ni las Minas de Riotinto pero Dios sabrá lo que Él me tenga guardado". A estas alturas de la vida, preguntada por su pueblo del alma responde con rotundidad que, es "Nerva, a donde volvería otra vez si tuviese 20 años".
La hermana recuerda con emoción la dignidad que atesoraban las familias más humildes de la localidad minera a pesar de la pobreza extrema en la que vivían y las atenciones que dispensaban a los niños y a las personas más ancianas que no podían valerse por si mismas. "Eran pobres pero dignos y los niños tenían caras de ángeles", recuerda.
También recuerda con una sonrisa imperturbable los años en los que se dedicó a la educación de generaciones enteras de nervenses que pasaron por su aula cuando daba clases en el colegio Virgen Milagrosa hasta su desaparición a mediados de la década de los 90. "Los niños eran un encanto y muy listos", aclara.
Las Hijas de la Caridad han sido una de las instituciones más queridas en Nerva desde principios del Siglo XX, cosechando innumerables muestras de cariño en agradecimiento a la atención prestada a las familias más necesitadas del pueblo y a la educación de cientos de niños y niñas de la localidad minera.
Buena prueba de esto son los innumerables homenajes, actos de reconocimiento y nombramientos de varios edificios y espacios públicos con los nombres de algunas de las Hermanas, como son los casos del Centro Social Polivalente sor Feliciana y el Parque Municipal Sor Modesta, así como la consolidación de la asociación de la Medalla de la Milagrosa fiel a los ideales de la congregación.
0 comentarios:
Publicar un comentario