BBC Ciencia |
El volcán Kilauea es uno de los más activos de la Tierra. |
Un equipo de geólogos que buscaba fuentes de energía geotérmica en Hawai perforó directamente -y de forma inadvertida- un pozo hacia el repositorio magmático, a 2,5 kilómetros bajo la superficie.
La roca fundida, que normalmente hubiera erupcionado, se proyectó varios metros hacia la superficie pero posteriormente se solidificó.
Y esto, dicen los científicos, ha permitido la extraordinaria oportunidad de estudiar de cerca los procesos geológicos que ocurren escondidos en las profundidades del planeta.
"Este hallazgo marca la diferencia entre encontrar huesos de un dinosaurio en un museo y poder ver a un dinosaurio real y vivo en el campo", dijo a la BBC el profesor Bruce Marsh, especialista en sistemas magmáticos de la Universidad Johns Hopkins, en Estados Unidos.
"Este será el parque jurásico del magma", afirmó el investigador.
Hábitat natural
Normalmente los geólogos sólo pueden estudiar estas rocas en los sitios donde ha fluido lava después de una erupción.
Este hallazgo marca la diferencia entre encontrar huesos de un dinosaurio en un museo y poder ver a un dinosaurio real y vivo en el campo" Prof. Bruce Marsh |
"Sabemos que el magma existe en gran abundancia en varias partes de la profundidad del planeta porque la hemos visto solidificada, pero nunca hemos podido verla en su hábitat natural", expresó el científico.
"Es por eso que éste es un evento sin precedentes".
Los científicos, explica el experto, podrán ahora estudiar cómo se solidifican y cristalizan las rocas en "tiempo real".
El hallazgo, en el este de la Isla Grande de Hawai, fue llevado a cabo en 2005 pero hasta ahora los investigadores no había hecho públicos los detalles de su trabajo.
El pozo había sido colocado a través de los flujos de lava basáltica formados por el Volcán Kilauea.
El objetivo del proyecto de perforación, llevado a cabo por la compañía Puna Geothermal Venture, era encontrar fuentes de vapor de agua en la profundidad de la roca fracturada para utilizarla en turbinas para generar electricidad.
Pero los ingenieros quedaron asombrados, no sólo cuando llegaron al magma, sino cuando se dieron cuenta de la enorme fuente de calor que había a la relativamente poca profundidad de 2,5 kilómetros.
"Estamos hablando de más calor que en el infierno -dice el profesor Marsh- un lugar con más de 1.000 grados centígrados".
Cámara dócil
Los científicos afirman que no hay riesgo de que la perforación cause una erupción. |
Según el profesor Marsh, la cámara ahora es "dócil" y se está enfriando lentamente.
El magma, explica, tiene una consistencia de jarabe.
Aunque no saben qué tan grande es, algunas pruebas iniciales sugieren que pudo haberse formado por la actividad del Kilauea en los 1950, o quizás desde 1920.
Los científicos ahora planean convertir el sitio en un enorme laboratorio de investigación en el que podrán tomar muestras de distintas secciones de la cámara.
Con esto esperan poder entender mejor los cambios de solidificación que ocurren cuando la roca pierde su temperatura.
Tal como señala el profesor Marsh, la composición química del magma es similar a la del granito que compone la corteza en los continentes.
Por lo tanto, este hallazgo podría permitir por primera vez observar in situ los procesos reales que diferencian a la roca continental del basalto primitivo del que está formado casi todo Hawai.
El hallazgo fue presentado durante la Conferencia de Otoño de la Unión Geofísica Estadounidense que se celebra en San Francisco.
0 comentarios:
Publicar un comentario