La terna y el mayoral salen a hombros en Zalamea La Real

domingo, 6 de septiembre de 2009

FUENTE: ODIEL INFORMACION / Escrito por Inma León
Buena tarde la de ayer en Zalamea la Real con Ferrera, Capea y Nazaré que estuvieron a la altura del buen juego que derrocharon los astados de la ganadería de Peñajara, totalmente recuperada, tras problemas hepáticos.
La tarde prometía y finalmente no defraudó a la afición zalameña ni a más aficionados de los alrededores que se acercaron ayer a esta bonita plaza para disfrutar de un día de toros. Una tarde en la que Ferrera estuvo en Ferrera con el cuarto de la tarde, un Peñajara que peleó en el peto y al que le propìnó lances de capa con calidad. En banderillas demostró que está en forma y levantó al público con un quiebro y un recorte tras esperar al burel de rodillas. Con la franela, ‘Capote’ se empleó y con transmisión fue a más, algo que el extremeño aprovechó para intercalar derechazos templados y pases de pecho de pitón a rabo. Por el izquierdo, Ferrera, un torero curtido a base de cornadas, a los que yo llamo gladiadores, se acopló con sudor, tras algún que otro enganchón, gustando y gustándose al natural, sacándolos uno a uno, tirando de él y sometiéndolo por abajo. Con el primero de la tarde estuvo voluntarioso con un toro que salía suelto y que nunca terminó de humillar. Nazaré demostró ayer que, a pesar de que torea poco, está en el sitio y puede ser alguien en esto con capacidad para resolver papeletas de toda índole. El torero de Dos Hermanas corrió en suerte con un toro castaño, serio, veleto y astifino de los que te piden el carné. Nazaré, que toreó con la capa más tranquilo que al primero, aprovechó el buen pitón izquierdo del Peñajara al que rompió por abajo con temple. Por el derecho, el toro pegajoso y andarín por ese pitón aunque se desplazaba cuando metía la cara, Nazaré le propinó una buena tanda, pero los mejores derechazos, circulares y molinetes vinieron al final de la faena. Así, tras una estocada desprendida, el presidente tardó, pero le concedió las dos orejas. Con el tercero de la tarde, el nazareno calentó los tendidos al abrirse de capa intercalando chicuelinas.

El astado presentó algunas complicaciones sobre todo por el izquierdo con el que derrotaba con tornillazos. No obstante, se movió y Nazaré estuvo voluntarioso demostrando que puede tener futuro en esto, nada fácil por cierto. En segundo lugar, que le correspondió en suerte a El Capea, salió un toro distraído, achichonado y con poca movilidad, que se quedó dormido en el peto. Tras brindarle su muerte al diestro Tito de San Bernardo, uno de los toreros más templados de los últimos 50 años, el burel mostró algo más de agilidad en la muleta, pero con poca transmisión y muchos puntos de sosería, por lo que el salmantino se acopló a media altura porque nunca humilló. Finalizó con manoletinas y antes de ello le pegó una tanda por el izquierdo, pitón por el que se dejó algo más. Con el quinto, uno de los más serios, acucharado y con un pitón izquierdo algo levantado, El Capea estuvo aseado con el capote basando su faena por el pitón derecho, por el que el Peñajara se mostró fijo y repetidor, lo que le valió para cortar una oreja tras media estocada y un descabello. Una tarde completa, gracias a la apuesta del Ayuntamiento de Zalamea y la Peña Cultural Taurina, que ha terminado con la salida a hombros de todos... Ferrera, Capea y Nazaré y el mayoral de una ganadería que hoy tiene motivos para estar contenta, tras superar problemas hepáticos y caerse por ello de algunos carteles importantes. Destacar que Zalamea ha sido la única feria de la provincia que ha mantenido su formato. Hoy la de rejones, así que si la cosa sale como ayer, el tema irá de triunfos, que es de lo que se trata.

0 comentarios: